30 de noviembre de 1939
Las tropas soviéticas, lideradas por el mariscal Kliment Voroshilov, invaden Finlandia por el istmo de Carelia sin previa declaración de guerra y tras la negativa del Gobierno finés a negociar con la URSS un reajuste de fronteras que incluye la cesión e intercambio de territorios próximos a Leningrado (actual San Petersburgo), negociación con la que la URSS pretendía evitar una posible agresión alemana por esa zona. El mariscal Carl Gustaf Emil Mannerheim asume la jefatura de las fuerzas armadas finesas. Es el inicio de la guerra de Invierno o guerra ruso-finesa, que se prolongará hasta el 12 de marzo de 1940.