23 de agosto de 153 A.C.
En Hispania, las fuerzas de una federación de tribus celtíberas, al mando del caudillo Caro de Sekaiza o Segeda (actuales Mara y Belmonte de Gracián, Zaragoza), derrotan a las tropas romanas que dirige el cónsul Quinto Fulvio Nobilior en territorio de los Arévacos, concretamente a unos 15 kilómetros de Numancia, en el valle del río Baldano, afluente del Duero. Caro perece en el combate.