Juan de Escobedo, secretario de Juan de Austria, gobernador de los Países Bajos y hermanastro del rey Felipe II de España, es asesinado a estocadas cerca del palacio de Abrantes, en Madrid, por tres personas embozadas (se conoce el nombre de una, Antonio Enríquez) a sueldo de Antonio Pérez, secretario universal de Felipe II. El crimen, con un móvil político y aparentemente autorizado por el rey, al que Pérez ha convencido de que Escobedo alimenta las ambiciones de Juan de Austria de ser coronado soberano de Inglaterra y Escocia mediante un matrimonio con la reina Maria Estuardo, sirve en realidad para impedir que Escobedo revele haber descubierto que Pérez, en complicidad con Ana de Mendoza, princesa de éboli, se enriquece gracias a la venta de cargos públicos, la revelación de lo que se discute en los Consejos de Estado y los tratos que mantiene con dirigentes de la rebelión en Flandes contra el dominio español.